La Villa de Olmedo en Valladolid ha acogido este viernes la XIV entrega de Premios de Cooperativismo y Economía Social de Castilla y León. Un galardón que se ha celebrado en este municipio, en el corazón del entorno rural, ya que supone un icono en la región debido a la importancia que tiene la economía social dentro de su tejido social y empresarial. Una entrega de premios a la que ha acudido, entre otras personalidades de diferentes Comunidades Autónomas, el consejero de Industria, Comercio y Empleo, Mariano Veganzones Díez.
Por su parte, el consejero ha puesto el foco en la importancia de esta economía social que «tiene una gran fuerza en la España del interior y es capaz de generar riqueza y empleo» y ha lamentado que «sea la gran olvidada de los gobiernos centrales que se preocupan más de los ricos que de esta España que necesita la ayuda y solidaridad de todos».
La economía social supone el motor dinamizador del entorno rural, ya que es capaz de generar riqueza y empleo en las zonas con baja densidad de población o más despobladas. Por eso, «son un ejemplo a seguir en todos los ámbitos sociales y hace muchísima falta porque la pobreza en España no aminora y se ha convertido en un problema», ha matizado el consejero quien ha añadido que «es una obligación que la economía social reduzca la pobreza en favor de la inclusión de todas las personas, en el mercado laboral y que la gente en España tenga el derecho a esa igualdad».
Una jornada en la que también han participado otros representantes de la economía social de otras Comunidades Autónomas en la mesa redonda: «Buenas prácticas en materia de política pública para el fomento de la economía social», como es el caso de la directora general de Pymes y Autónomos del Gobierno de Aragón, Ana María Sanz; la subdirectora General de Economía Social de la Xunta de Galicia, Farrah Lisa Megazhi, el director general de Cooperativas y Economía Social de la Junta de Extremadura, Diego Sánchez y que ha sido moderada por la directora general de Economía Social y Autónomos, Emma Fernández.
Cuatro galardones bajo imponentes cúpulas churriguerescas
La arquitectura de la antigua iglesia barroca de estilo churrigueresco, convertida hoy en el Centro de Artes Escénicas San Pedro, no ha dejado indiferente a ninguno de los asistentes que han acudido a la gala de la XIV edición de Premios de Cooperativismo y Economía Social de Castilla y León.
En este espacio cargado de arte, bajo unas cúpulas blancas decoradas con motivos de pan de oro se ha hecho entrega de estos galardones en cuatro categorías diferentes. El ‘Premio a la mejor empresa cooperativa del año’, por su trayectoria empresarial y permanencia en el mercado ha sido para la Sociedad Cooperativa General Agropecuaria (ACOR).
En la segunda categoría, el ‘Premio a la mejor iniciativa cooperativa’, por el carácter vanguardista de su proyecto empresarial y la puesta en funcionamiento de actividades innovadoras que dan respuesta a necesidades sociales y tecnológicas a PANACEA Cooperative Research, S.Coop.
La tercera modalidad como ‘Premio a la mejor empresa con otras formas jurídicas de economía social’, ha sido para Comparte León S.L. Un galardón que ha sido entregado por el compromiso de esta empresa con los valores y principios propios del cooperativismo y de la economía social, así como por el fomento de la igualdad de oportunidades de los colectivos más vulnerables. Además, esta empresa apuesta por la economía circular, el consumo responsable y hace un esfuerzo para conciliar la vida laboral y familiar de los trabajadores.
Por último, el ‘Premio a la persona o entidad que se haya distinguido por su contribución al desarrollo del cooperativismo y la economía social’ ha sido para D. Florentino Mangas Blanco por su dilata trayectoria en el cooperativismo agrario y ganadero, así como por su implicación directa en el desarrollo del entorno rural.
La directora de la cátedra (CoES): Mª Eugenia Serrano ha sido la encargada de entregar el premio a la mejor iniciativa cooperativa que ha recaído en PANACEA Cooperative Research, S.Coop.